De regreso

 La última vez que estuve por aquí estaba devastada, perdida, deprimida, derrotada, en fin, estaba de lo peor. Hoy por fin regreso, y he de decir que ahora me siento realizada, muy feliz, muy diferente a como estaba antes.

He de decir que logré salir adelante y rectifique mis errores, me superé, me levanté del suelo y seguí adelante sin mirar atrás, de nuevo me puse a caminar para conquistar mis más preciados sueños.

De hecho alcance una meta, una gran meta, por fin logré terminar mi carrera de licenciatura en derecho, en septiembre del año 2019 me gradué. Para ese entonces, lo que creí es que tenía que buscar un trabajo de lo que estudie, o algo afín al menos, pero sinceramente, creo que eso es mediocre, para mí, lo que realmente sigue es lograr mi mayor sueño: ser escritora profesional, ahora no hay obstáculos para no escribir, antes no lo hacía porque según yo, tenía cosas más importantes que hacer, como hacer tareas, proyectos, ensayos escolares, clases, extra-clases, ponencias, servicio social y todo lo que la universidad conlleva, además de trabajar constantemente para pagar la colegiatura.

Hacer eso me desgastaba mucho; trabajar y estudiar es difícil, exigente y desgastante, tienes que echarle más ganas que los demás, porque te dedicas a dos cosas.

Es verdad que ahora tendré que trabajar tiempo completo, pero ya no será lo mismo ni por asomo. De hecho el lunes veintidós comencé un nuevo trabajo, en una librería, la cual no tuvo nada que ver con mi carrera, pero decidí trabajar ahí por dos razones; la primera fue que amo los libros y estar rodeada de ellos, fue una grata experiencia, y la segunda es que necesitaba el dinero con urgencia, tenía muchos gastos, entre ellos pagar mi título profesional y cédula, además de terminar de pagar una laptop que tuve que sacar a crédito, además necesitaba comprar zapatos y ropa, y tenía otras deudas que pagar por ahí.

La verdad es que estaba muy entusiasmada con ese nuevo trabajo, siempre quise trabajar ahí, y por fin tuve esa oportunidad, sin embargo al final solamente duré un mes en ese trabajo, pero lo bueno es que aprendí algo nuevo y eso fue lo mejor de todo, y además disfrute mucho trabajar ahí, a pesar del horario, y cómo extra; gane buenas amigas.

Renuncié de ese gran trabajo por irme a uno mejor —económicamente hablando—; en ese aprendí una valiosa lección, no vale la pena trabajar en un lugar que no te gusta aunque ganes muy bien, y más si no valoran tú trabajo, como fue mi caso, ahí solamente duré seis meses y he de agregar que no me dejaban renunciar, sino solamente hubiera durado cuatro meses. Pero al menos ahí aprendí cosas nuevas y no fue tan mala experiencia, así que me quedo con lo bueno y lo malo lo olvide. Y aquí igual hice muy buenas amigas, así que está muy bien.

Actualmente estoy de becaria y por la pandemia no me he podido presentar a mi área de trabajo, así que he invertido mi tiempo a los cursos de becaria y todo lo demás a escribir, retomar mi canal de YouTube —que les dejo al final para que puedan visitarlo—; también estoy escribiendo mi libro, por fin, después de haber abandonado ese proyecto por mucho tiempo e igual estoy retomando este blog demasiado abandonado.

Y para finalizar con este regreso, solamente les quiero dejar un pequeño consejo…

Que les valga lo que les digan los demás, lo único que importa es lo que piensen ustedes. No permitan que nadie los cambie, ni tampoco cambien por nadie. Quiéranse como son, valórense cual estrellas deslumbrantes son. Déjense guiar por la bella luz lunar que los llevará a la felicidad que anhela su tierno y dulce corazón. Dejen la fragilidad de lado, levántense y persigan todo aquello que quieren conquistar.

Y bueno, ahora tres preguntas para ustedes y para mí; si ya alcanzaron una de sus metas más grandes… ¿Y ahora qué hay qué hacer? ¿Debemos seguir otra? ¿Hay que avanzar más aún o perfeccionar lo que ya hemos logrado?

Les dejo mi canal de YouTube: https://www.youtube.com/channel/UCYAu0KfUpe9Rbfo8_KFJWPA?view_as=subscriber